Una historia auténtica

La familia Ayllón, fundadora de Quinta Fresca, disfrutó desde siempre el placer por cocinar, comer y beber. Susy, experta cocinera, amaba la buena cocina y Ricardo, ingeniero agrónomo y "gourmand" disfrutaba sus comidas y los buenos vinos. En su quinta familiar se probaban variedades nuevas de frutas y hortalizas, y era habitual para ellos comer a diario platos como un pollo con mermelada de cebollas y estragón, un delicioso soufflé de hinojos, una exquisita salsa casera de tomates y berenjenas o una tarta de peras al cardamomo, elaborados con productos frescos recién cosechados de la propia huerta. También familiares y amigos disfrutaban de los productos cultivados en la quinta, llevándose cuanto pudieran cada vez que los visitaban, ya que no conseguían esa calidad en los canales de comercialización convencionales.

Hacia fines de los ochenta, Felipe, uno de sus hijos, joven estudiante de agronomía e inquieto buscador de oportunidades, se anima a emprender el negocio que hacía tiempo venían pensando con su padre: un servicio que acercara productos bien frescos con una alta diferenciación a casas de familia, sin intermediarios, directamente de la huerta a su hogar.

En mayo de 1990 nace QUINTA FRESCA como el primer servicio a domicilio de frutas y verduras recién cosechadas y seleccionadas. Sus primeros clientes fueron familiares y amigos, pero la búsqueda constante por la excelencia, la alta diferenciación del producto, una firme orientación al servicio, una desinteresada recomendación "boca en boca" de sus clientes, el compromiso de su gente y, sobre todo, un gran espírutu emprendedor, lograron convertir la idea original en una gran empresa familiar que hoy entrega a domicilio más de 400 productos exclusivos y artesanales con máximos estándares de calidad.

Hoy, como hace casi 20 años, Quinta Fresca sigue conservando intacta su escencia, revalorizando sabores, texturas y aromas olvidados y brindando lo mejor para los suyos, directamente del origen a su hogar...

 
 
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